miércoles, 29 de febrero de 2012

dejar






dejarlo todo
sin antes
preguntar a los peces

qué es lo que tanto me gusta de este mar?




domingo, 26 de febrero de 2012

lucidez















ahora que lo sabes todo, ¿qué clase de amor tendrás? 
(lito nebbia)





sentimiento fugaz
es bienvenido
cómo escribirlo?
se puede?
lo tengo acá
en la boca del estómago.
no.no voy a vomitar.no tengo ganas.


solo quisiera extenderlo sobre el espacio.
desplegarlo.


aquí, en mi cuerpo
dentro mío nada más
ocupa demasiado lugar.


no es odio
ni amor
no es tristeza
quizá
melancolía
no esa que añora lo pasado.


aunque me fuercen 
yo
nunca voy a decir 
que todo tiempo 
por pasado 
fue mejor.


siento la mirada limpia
distendida


ella,solo observa lo que ve


y, lo que veo,


es
tan claro
como la luz.













viernes, 24 de febrero de 2012

domingo, 19 de febrero de 2012

fuerza inaudita
al centro

todo mi cuerpo alrededor del ombligo

fuerza suave

del aire
no imaginé nunca antes

(de todas maneras habita)

fuerza suave
estar de pie
ASÍ
aunque no sepa
como

yo
sobrevivo
a esto
yo
crezco

ternura
meciéndome
en
el centro.


jueves, 16 de febrero de 2012

una mujer
atravieza


largos paisajes
absoluto
el cielo

una mujer
sabe

largos paisajes
espacios
en el aire

una mujer
camina
despacio

tras el vidrio
empañada
la lluvia

y

una mujer
observa
sabe

convertirse
en la noche.


F.

martes, 14 de febrero de 2012

sábado, 11 de febrero de 2012

elegia a luis alberto spinetta


Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.

Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado
que por doler me duele hasta el aliento.

Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.

No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.

Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.
En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.
Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.

Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.

Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera

de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.

Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irá a cada lado
disputando tu novia y las abejas.

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.

A las ladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.

(El rayo que no cesa)

sábado, 4 de febrero de 2012

Preguntas







ya que navegas por mi sangre y me despiertas en la mitad del día para acostarme en tu recuerdo dime que diablos hago por que te necesito quien eres mudo sordo recorriendome razón de mi pasion porque quiero llenarte solamente de mi y abarcarte acabarte y eres unica patria contra las bestias del olvido.  


Juan Gelman