caduca. venciéndose, aún así...

todavía chorreando escupitajos

vomitada

en tanto

por ahora

meada

rota

estúpida

castrada

F.

No es la materia la que pacifica;
es la modulación, la voluntaria:
el vientre solidario del cuchillo,
las débiles cabezas, las unánimes,
y sus labios; la física dulzura
que entra despacio al corazón y habla.

Antonio Gamoneda

resplandor

Tengo todo el silencio de la noche para mí.

Hago lo que quiero con el silencio, con la noche, con el calor del hogar.

Es mi cuerpo inconforme el que rompe el silencio.

Solo este cuerpo me grita una caricia, una mirada...algunas palabras de amor.

F.

No recuerdo cuántas fueron las veces que hicimos el amor.Nunca paso la noche en mi cama.Jamás pasamos un día juntos.

Cuando se fue, me quede varios días en silencio sin distinguir que era un sábado, un martes, un domingo.

Tenía todo el silencio para mí. también el frío de las sábanas, el centro del hogar, el calor de mi casa.

F.

Nunca dejarás de serte mía, pero me río de tu libertad. No podés cancelarte en mi memoria. Sos más en mí que yo de mí. Te existo, péndulo del aire.

J.Gelman